Las ilusiones de la planificación mundial
DOI:
https://doi.org/10.52195/pm.v20i1.865Abstract
Es obvio que en estos tiempos de división internacional del trabajo, por una parte, y de intervención gubernamental en la economía, por otra, la ilimitada soberanía de cada nación debe llevar al nacionalismo económico y, mediante él, al conflicto. Nadie osa negar que el nacionalismo económico y la paz son incompatibles. En todos los proyectos de establecimiento de un orden más satisfactorio se incluyen siempre propuestas para sustituir los permanentes antagonismos del nacionalismo económico por algún género de cooperación internacional. La más popular de estas propuestas se llama planificación mundial o internacional. La planificación es la receta mágica de nuestro tiempo. La gente está convencida de que curará todos los males de la vida nacional e internacional. El prestigio del eslogan «planificación» es tan grande que su mera mención parece ser ya una solución de todos los problemas económicos.